Tendremos una semana de movilizaciones importantes en Brasil. El próximo martes (17), asambleas en todo el país pueden declarar una huelga indefinida de los trabajadorxs postales contra la privatización de la empresa postal Correio. El día 18, los sindicatos de empleadxs publicos convocan a iniciar una huelga general contra la PEC 32 (Propuesta de Reforma Constitucional). La propuesta del gobierno de Bolsonaro destruye los servicios públicos a través de la reforma administrativa y esta reforma está en discusión en la Cámara de Diputados.
Ante tal importancia, las centrales sindicales brasileñas y la campaña Fora Bolsonaro llevarán a cabo en esta fecha una jornada amplia de lucha con protestas y paros en diversas categorías contra la situación en el país que atraviesa una profunda crisis económica y sanitaria.
Los cambios en la ley de servicio civil tienen la intención de liberar al estado de pagar por derechos públicos como Salud y Educación. Con los cambios previstos por el PEC 32, no solo puede haber un proceso de despido masivo de servidores públicos, sino también el empeoramiento de los servicios y la total falta de asistencia a la población. Las privatizaciones obtendrán aún más incentivos. Derechos como la Salud y la Educación, garantizados por la Constitución, pueden convertirse en mercadería. Profundizando las Participaciones Público-Privadas (PPP), los instrumentos de cooperación previstos permitirán a las empresas realizar servicios públicos utilizando la estructura existente. Una transferencia explícita de riqueza pública al sector privado.
El 18 de agosto también es un día de protesta para exigir celeridad en la vacuna para todos en el país; ayuda de emergencia de al menos R$ 600, ya que nadie aguanta más el hambre y la miseria; garantizar puestos de trabajo y mantener los derechos de la clase trabajadora; así como la defensa de las libertades democráticas.
Ya hay más de 560.000 muertos por covid en el país y más de 20 millones de personas se han contagiado y mientras tanto asistimos a un festival de autoritarismo del gobierno de Bolsonaro.
Pueblos indígenas, trabajadorxs del sector publico, privado, trabajadores fabriles, quienes luchan por la vivienda, contra el racismo, el sexismo y la LGBTIfobia. ¡Este es un día de lucha para todos!
CSP-Conlutas enfocará todos sus esfuerzos para que haya una gran jornada nacional de luchas y paros el 18 de agosto que también cumpla con el rol de apoyo a la lucha de los trabalhadorxs.